jueves, 25 de septiembre de 2014

Logrando nuestro objetivo: liberación

Queridos lectores, estamos llegando al final de nuestro objetivo, quedando totalmente libres de tinte y demás químicos en el pelo. Es por eso que esta entrada (quizá la última) sea más cortita, y más bien con fotos que les muestren los resultados.

La verdad pensé que el camino sería más difícil, que me llenaría de dudas y terminaría sucumbiendo y regresando a la falsa idea de que el color del pelo es señal de juventud.

La semana entrante se cumplen seis meses de mi última coloración. Qué gran alivio he sentido al no tener que esconder mis canas, teniendo que apartar días específicos y sufrir los efectos en tiempo y dinero para pintarme el pelo. Hoy puedo decir que eso pasó a la historia.

He recibido comentarios variados, pero en general estos han sido positivos. Me siento feliz, segura y sobre todo libre de ser yo misma. Todavía me quedan un par de centímetros de color, pero esperaré unas cuantas semanas para darme un corte final.

En fin, aquí les comparto unas fotos en donde pueden ver el blanco en algunas partes y el gris en otras; antes pensaba que la textura de una cabellera canosa sería áspera, sin embargo, mi pelo natural es suave y aunque no lo crean, ¡brillante!.

Para todas aquellas que quieran dejar el esclavizante tinte, les aseguro que la transición no es tan difícil, lo único que se necesita es perseverancia, seguridad, y sobre todo ganas de sentir, a estas alturas de la vida, libertad.

 







viernes, 18 de julio de 2014

¡Aquí seguimos!

Queridas lectoras, no, no me he rajado a la transición ni me he pintado el pelo ni he sucumbido ante uno que otro comentario, mmm, negativo (envidioso) de repente. Sigo aquí, en este camino hacia un "look" natural, sano, diferente y nuevo, por lo menos para mi.
Mi hermana Mónica, luciendo
su "gris perfecto"

Por fin convencí a mi hermana que dejara el tinte y que se cortara aunque fuera un poquito, el pelo. Me dice que está encantada y que algunas personas le preguntan si ya se dejará las canas, a lo que orgullosamente responde que si. 

En verdad es un alivio dejar de ser esclava de un proceso que te quita tiempo y dinero, y que es por demás superfluo ya que sirve para seguir los convencionalismos sociales del amor a la eterna juventud. 

Mi esposo y yo nos fuimos a la playa con los tres nietos y la pasamos de lo mejor. Los niños se divirtieron en grande y nosotros los disfrutamos plenamente.

Fue un alivio no tener que preocuparme porque el agua del mar o el cloro de la alberca deslavara mi tinte. Eso es cosa del pasado, ahora disfruto enormemente el no tener que preocuparme por esas nimiedades; además, con tres niños pequeños, había cosas más importantes que atender. Ni siquiera hubo necesidad de utilizar la secadora de pelo. Mi corte natural, sólo con un poco de gel estuvo de lo más cómodo. 

Así va la transición queridas lectoras, ya me creció un poco el pelo, pero ya no me lo voy a cortar hasta que mi copete llegue a taparme los ojos. Ya es poco lo que me queda de tinte, a lo mucho dos pulgadas. Pero hay lugares, como a los lados y en la parte de atrás, en donde el pelo ya se ve totalmente blanco. 

Ayer me llamó una amiga muy querida, amiga desde la infancia, (vive en el DF) y me dijo que platicando con un grupo de amigas suyas tocaron el tema del tinte cada 20 días, de ese hartazgo de tener que retocarse las raíces, y toda la monserga del ritual, a lo que ella comentó de mi transición y por supuesto les entró la curiosidad, ¿quién es ese bicho raro que decide, a sus recién cumplidos 54 años, que el gris perfecto es lo de hoy? Pues si, aquí me tienen, para quien me quiera conocer en el antes (la primer entrada del blog) y el ahora.

Aquí les dejo dos fotos más para que vean, mi pelo sigue creciendo (¡por fin!) y ahora si, ya estoy llegando al punto en el el gris es casi perfecto.

Nos leemos pronto!
cl.









martes, 24 de junio de 2014

Bien pero bien cortito!

¿Nuevo look?
Queridas lectoras, pues ¿que creen? que me animo a cortarlo más pero más chiquito. Resulta que mi tan amado copete ya estaba bastante ZACATOSO, no me podía peinar ni ver (porque ya me tapaba los ojos) y entonces ayer, platicando con mi hermano, que me anima a cortarlo chiquito.

¿Que les parece este peinado
de pelo alborotado?
Fui con Mary, mi estilista de cabecera, y me dijo que todavía NO me podía sacar todo el tinte, pero que seguramente para septiembre u octubre ya saldría la mayoría. Me sentí muy bien porque comentó que mi pelo nuevo viene muy sano y brillante, y que seguramente me vería muy bien.

Aquí les dejo algunas fotos, para que juzguen por ustedes mismas, y si tienen tiempo, me den sus valiosísimas opiniones. 
Creo que aunque no es fácil, siempre es bueno un cambio,
O les late más este, que como
casi siempre lo traigo, es más
conservador.
¿no creen?

Nos leemos
cl.


lunes, 16 de junio de 2014

Una reunión social

Queridas lectoras. Aquí les narro las últimas novedades.

Por lo general no somos salidores, vamos al cine (en pareja) una vez a la semana, y los fines de semana la pasamos con las hijas y los nietos.
El sábado pasado hubo una excepción, ya que tuvimos una primera comunión con amigos que hacía mucho tiempo no veíamos. Yo estaba un poco ansiosa, pues aunque me trato de convencer de que NO me deben importar los comentarios ajenos con respecto a mi decisión de dejarme de pintar el pelo, pues siempre nos afecta un poco la crítica externa.

Recibí comentarios mixtos, pero la mayoría positivos con respecto a mi nueva apariencia. Como fue al aire libre, el brillo plateado de las canas salta a relucir de una manera evidente, y aunque algunas personas NO hicieron comentarios orales, si se notaba que con los ojos daban su ruidosa opinión. En realidad no se nota tantísimo, ya que como tengo rayos en toda la cabeza, no hay un alto contraste. Sólo en la parte de atrás, ya que (como en la entrada anterior) se puede ver el pelo ya sin tinte, pues con el último corte salió toda la pintura (el largo es como de 2.5 cms).

A ratos no se que hacer. Si cortarme más, si hacerme más rayos, aguantar a que pase el tiempo y vaya creciendo o de plano ponerme un sombrero. 

En fin. Les dejo unas fotos para que vean como vamos y me den su sincera opinión. Mientras tanto, nos leemos.

cl. 


miércoles, 11 de junio de 2014

Y seguimos informando …

Queridas lectoras

Seguimos con la transición entre el tinte y el gris perfecto. Me he encontrado personas que no veía desde hace tiempo, y les llama la atención mi cambio de look.

En principio como que no captan cual es el cambio, ya que como les mostré anteriormente, me hice rayos tupidos en toda la cabeza. Sabemos que con las lavadas, el sol y el paso del tiempo, el tinte se va aclarando haciendo que la transición no sea TAN evidente a simple vista, pero ya a detalle, por supuesto se nota el color natural de mis brillantes canas. 

Una de las conocidas que me encontré, la cual no veía hace cerca de dos años, me dijo que en una reunión (con unas amigas que de repente frecuento) habían comentado sobre mi decisión de dejarme de pintar el pelo. Cabe mencionar que el 95% de las mujeres más o menos de mi edad que conozco, se pintan el pelo desde que empezaron a percibir que el blanco se hacía evidente, lo cual es una costumbre muy arraigada en nuestra sociedad.

Me dijo, -pues que valiente, yo todavía no estoy lista para eso, pero te ves muy bien (claro, que me iba a decir) y cambiamos el tema a los nietos.
Mi mamá SI tiene el gris perfecto, y me insiste en que no me de por vencida y sobre todo que NO me deje convencer, si es que escucho comentarios adversos.

He estado investigando y leyendo mucho acerca de este cambio tan radical que algunas mujeres (como yo) queremos hacer en nuestras vidas. 

Dejar el tinte es dejar de ser esclava de la pintura, del tiempo perdido en su aplicación y sobre todo querer vivir una vida más saludable y natural. Pero también implica cambios en el arreglo personal como el maquillaje, el cuidado de la piel, etc. Retos al fin, que hacen de esto un acontecimiento.

Descubrí una página en Facebook que se llama "Revolution Gray". En ella, una de las precursoras actuales tiene un sitio en internet, da tips de belleza precisamente para quienes queremos hacer el cambio. 

A grandes rasgos, explica que es importante ver nuestra "composición física" en escala de grises (que va del blanco al negro, pasando por todas las gamas de gris).
Actualmente es muy fácil obtener una foto nuestra en blanco y negro, ya que hay apps para los teléfonos celulares o dispositivos electrónicos en donde se puede cambiar de color cualquier imagen.

De esta forma podemos ver si nuestra composición es clara, media u oscura. También habla sobre los colores de nuestra ropa, los accesorios que usamos, cuales son los más adecuados para nuestra edad, tono de piel, etc. Se las recomiendo ampliamente. 

Es toda una nueva aventura, queridas lectoras. Yo me siento medio rara con el pelo TAN corto, pero afortunadamente me crece rápido, y poco a poco voy viendo, con asombro, que mi pelo, antes de lo que imagino, tendrá el tan ansiado gris perfecto.

Un abrazo de media semana.

cl.





viernes, 6 de junio de 2014

¡Un corte muy chiquito!

El corte más chiquito que me atreví … (Más chiquito, no creo)

Ayer fui a cortarme el pelo. Iba decidida a salir casi a rape, pero a la mera hora me entró el pánico.
Mi hermana me dijo, ¡¡¡NO TE LO CORTES!!! (ella le tiene fobia al pelo corto) pero pensé que de esta forma aceleraría el proceso y la transición del tinte al “gris perfecto”.

Por fin, llegué con mi estilista de cabecera y le dije, saca lo más que puedas del tinte, y en automático sin siquiera pensarlo le dije PERO DEJA MI COPETE, ese fleco largo que llevo desde hace varios años, pero que me gusta mucho.

Y dicho y hecho, la parte de atrás tiene ya CASI por completo el color de mi pelo natural, a la parte de arriba todavía le faltan varios meses.
 
Había en el salón unas 4 o 5 señoras, 3 de ellas bastante mayores que yo, RETOCANDO SUS RAÍCES. Una de ellas me veía y me veía, como pensando, TE URGE UN RETOQUE, ¿NO HAS VISTO TUS RAÍCES?… se hacía como que veía interesada una revista, pero en realidad estaba más interesada en mi conversación con Mary (la estilista).

Levanté la voz un poco para que no se fuera a torcer el cuello tratando de parar la oreja, y comenté que en mi viaje había visto muchas señoras muy elegantes con el pelo gris o blanco, que “allá” cada vez más mujeres de mi edad (en promedio) se estaban dejando las canas, que más que un color de pelo era un estilo de vida, el ir natural sin tanto químico las hacía sentirse bien consigo mismas así como con su entorno, etc., etc.


Claro que mejor lo dejé ahí, porque sé que al dejarme de pintar el pelo en el salón, habrá una clienta menos; mi estilista estaba un poco tensa y yo no quería ser inoportuna. Terminó de cortar y casi ni tuvo que peinarme ya que el corte está tan natural (y el pelo quedó tan chiquito) que en tres minutos y con los dedos me quedó perfecto.


Me levanté satisfecha, le di las gracias y me salí lentamente, cual pavorreal, presumiendo ante las atónitas clientas, mis casi 5 cm de raíz y el brillo natural del resto de mi cabeza.

Feliz viernes, queridas, espero sus comentarios y sobre todo que alguna de mis lectoras se anime. No es fácil, pero lo que vale, cuesta.

cl.

miércoles, 4 de junio de 2014

Gray is the new black!

Con mi hermana Mónica, con un
parecido en el color del pelo. Yo
disfrutando la transición.
De viaje con mi nueva transición. Es increíble como cambian las perspectivas en nuestra visión cuando estamos en medio de un proceso. Tuve oportunidad de ver, apreciar y encontrarme con lo que quiero y no quiero llegar a ser.

Pude ver en repetidas ocasiones, a mujeres que se aferran a esa falsa juventud que todas "quisiéramos" prolongar. Pero no engañan (engañamos) a nadie.
Y también pude ver, y sobre todo APRECIAR, a las mujeres que orgullosamente portan su gris perfecto.



Creo que ya no falta tanto para tener ese color.
Me encontré con una de ellas en La Estatua de la Libertad. La vi desde lejos y me topé con ella en dos o tres lugares. No sabía sí hablarle o no, queriendo darle un cumplido desde el principio pero sin saber como lo tomaría. Por fin estuve cerca y le dije "Me encanta tu pelo", estoy en el proceso de dejar el tinte pero sé que toma tiempo. ¿Cómo te sientes?

Me dijo, –yo duré mucho tiempo con el tinte, pero ya estaba harta; hasta que hace un año, vi un programa en TV donde hablaban del empoderamiento de la mujer, de que el pelo gris ya no era señal de vejez sino de fuerza; que al aceptar nuestra realidad tendríamos más fuerza interna y que por lo tanto se mostraría en nuestras acciones y seguridad personal. 

Me dijo:  "el gris es el nuevo negro" . 
Es cuando, buscando el significado de esa frase que se utiliza para marcar tendencias, realmente me di cuenta que no es únicamente el color del pelo, sino todo un modo de vida. Es aceptar nuestra edad con clase, las experiencias que nos ha dado la vida, que es lo que nos hace ser lo que somos.


Por supuesto me dio tanto gusto escucharla, con esa seguridad a flor de piel. Irradiaba confianza. Ni su nombre pregunté, no fue necesario.

Representaba a todas las mujeres que, como yo, queremos ser nosotras mismas.

Nos leemos,

cl.




jueves, 29 de mayo de 2014

Está en los genes!


Que tal queridas lectoras. Espero estén bien y disfruten la semana que ya casi termina.

Sin mucho preámbulo, les comparto unas fotos de la familia, para que se den cuenta que los genes predominan, y aunque no queramos, lo tenemos que aceptar. 



Estos son mis papás. Mi papá tiene el pelo blanco casi desde los 40.
Mi mamá lo tiene gris, súper cuidadito y suave.
Este es mi hermano mayor. Recientemente
cumplió 55, pero tiene el pelo así desde hace
mas de 10 años.


Ya llevamos casi 3 centímetros
y me está encantando la transición.



El gris/ blanco es de familia, y aunque hemos tratado de ocultarlo por años, es evidente que de alguna forma va a salir a relucir.

Mi mamá es menos canosa que mi papá, pero mis hermanos y yo heredamos totalmente la blancura del pelo de mi papá, ya que mi hermana y yo llevamos años pintándonos el pelo.




Poco a poco va dominando
la cabeza Lara :D
En fin, seguimos con la transición y con la paciencia, que de repente parece que se nos va de las manos… 
Que tengan un excelente fin de semana. 
Nos leemos pronto,

cl.

martes, 27 de mayo de 2014

El gris evidente…

El fin de semana estuvo lleno de actividades familiares diferentes a la cotidianidad del trabajo entre semana. Estuvimos con nuestra amada familia, y corrimos una carrera de 10 kms. mis dos hijas, mi esposo y yo.

El gris de mi pelo se hace cada vez más evidente, al grado que mis nietos me preguntaron, abuela ¿se te está poniendo el pelo blanco? ¿como Elsa? (personaje de la película Frozen), y les digo SI!!! ¿que les parece? a lo que ellos contestan, ¡TE VERÁS HERMOSA!

De repente me siento rara, no tanto incómoda sino que siento que todas las miradas están clavadas en la raíz de mi pelo. Hay momentos en que quisiera ir al salón de belleza a cortarme el pelo chiquitito para acelerar el proceso, pero mis hijas me dicen NO lo hagas, NO te sentirás agusto; es mejor esperar un poco porque serán demasiados cambios. Creo que tienen razón, lo que se necesita es PACIENCIA, como lo he venido diciendo desde el inicio de esta aventura.

Les dejo unas fotos, queridas lectoras, para que vean la evidencia y juzguen por ustedes mismas. Espero sus comentarios y nos seguimos leyendo.

cl.
Con mis hermosas hijas, antes de la carrera

Aun tengo el cuero cabelludo lastimado

Poco a poco se hace más evidente.






Poco a poco vamos con la transición

viernes, 23 de mayo de 2014

El peinado, despeinado

Seguimos con la aventura. Una parte muy importante de este "proyecto" es, como en todo, ver el lado positivo de las cosas, tomarlo como un gran reto y aprender en el camino.
Como les comentaba en otra entrada, hay días buenos y otros no tanto, pero yo estoy decidida a hacer de esta transición un aprendizaje memorable, rompiendo convencionalismos sociales y siendo yo misma.


Es increíble ver, a lo largo de la vida, cómo hay gente que cree que con comentarios ácidos te abrirá los ojos para que veas que estás en un error. Sin embargo, vivir rodeada de gente positiva que te acompaña en el camino, como dice el comercial, no tiene precio.

Un poco de historia.


Cuando fui niña, mi mamá siempre me trajo con el pelo recogido. Tenía el pelo largo y lacio, y siempre me hacía trenzas para que no se me enredara. Yo a veces las odiaba pero en esa época, el repelar sólo te causaba problemas. Nunca fui una niña dócil que digamos, así que repelaba de todos modos, aún sabiendo que no me saldría con la mía.

En vacaciones me permitían traer "colitas", pero mi pelo era tan largo que a veces sufría las consecuencias.

Con el paso del tiempo llegó el momento en que me debía peinar sola. Siempre tuve el pelo largo, pero lógicamente terso y sedoso, características de salud y juventud.

Me lo cepillaba varias veces al día y por lo general lo traía suelto pero no le daba mayor importancia.

Siempre lo traje largo, aunque no tanto como en mi niñez, pero después de que nació mi primera hija, me lo tuve que cortar chiquito, ya que se me empezó a caer (seguro las que son madres, queridas lectoras, se podrán identificar con esto).

No pasó a mayores, seguía con mi pelo castaño claro, pero de repente me empezaron a salir las primeras canas. Eso fue a principios de mis treintas. Empecé a experimentar con tintes de varios colores, (aun no eran tan evidentes las canas) y un tiempo me dio por pintarlo ROJO! 
Aun era muy joven, y aunque a mis hijos no les encantaba, yo me sentía soñada con ese color. Claro que después de algunos años, al ver fotos de esa época, me preguntaba ¡QUÉ ESTABA PENSANDO!

Llega la madurez

Bueno; así le llamamos a la época en la que llegamos a los 40s y posteriores años de nuestra vida. Los hijos se van, seguimos con ánimos de hacer cosas, y aunque nos sentimos de maravilla, la gravedad no perdona. Tengo muchos años haciendo ejercicio, y eso me ha ayudado a mantenerme en forma, tanto física como mentalmente (correr es una terapia), pero no podemos ir contra la genética. Mi papá tiene el pelo blanco desde sus treintas, cosa que heredamos mis hermanos y yo. Pero por supuesto, mi hermana y yo nos lo hemos pintado durante los últimos 20 años. 

Aceptar

Tarde o temprano debemos aceptar que ya no tenemos 20 años ( o 30 o 40 …), y que la vida está llena de altibajos que nos hacen ser lo que somos; crecen los hijos, se casan, tienen hijos, y entras en la maravillosa época de ser abuela. Lo más maravilloso que existe en el UNIVERSO sin exagerar, (las abuelas que me leen seguro estarán de acuerdo conmigo), y entras en una etapa en que la SALUD y el BIENESTAR es lo más importante (aclaro: no que no lo sea anteriormente en tu vida, pero no tienes que preocuparte TANTO por eso, ya que la juventud ayuda si tienes una vida sana y moderada).

Aquí quiero hacer un paréntesis importante, para contarles una de las razones al tomar esta decisión. Mi hija mayor siempre ha estado en favor de lo natural, y desde hace muchos años me dijo: mamá, ¿por qué no te dejas de pintar el pelo y dejas salir tus canas? Seguramente te verás de lo más elegante y distinguida. Además, piensa en el daño que te haces, tu cuero cabelludo, el ambiente, y a nadie engañas, ya que tu pelo está un poco maltratado y se ve el tinte (muy sutilmente me lo dijo, claro). JA! NI MUERTA siempre fue mi respuesta. Hija, QUÉ RAZÓN TENÍAS, GRACIAS!!!

Ahora que estoy en el proceso, mis dos hijas y mi esposo me apoyan y me echan porras. Creo que eso es algo muy importante, sentir el apoyo de tus seres más cercanos, y la fuerza que te dan al tomar una decisión.

El peinado, hoy

Estoy en un proceso difícil, porque ya tengo aproximadamente dos centímetros de raíz. Pero he estado haciendo pruebas; me doy cuenta que no debo MARCAR la raya en mi cabeza, ya que eso hace que sea más evidente mi pelo blanco. Es por eso que mi estilo es "despeinado" o sea, lo seco y lo modelo con aire tibio para que quede un poco más al natural. Ayudan muchísimo los productos que estoy usando (los describo en mi entrada anterior) además de que son un buen apoyo psicológico (me entienden, ¿no?).

Lunes, me hice la raya marcada
y claramente se ve la raíz.
Jueves, sigo sin entender que
¡¡¡la raíz se hace más evidente
si marco la RAYA!!!
Hoy decidí dejarme el pelo
un poco más alborotado y
aunque se sigue viendo la raíz,
ésta es menos notoria. 

En fin, seguimos con el proceso. Ya es VIERNES y el fin de semana correremos una carrera de 10km con mis dos hijas y mi esposo. Luciré orgullosa mi raíz. 

Ya me muero porque mi pelo crezca y tener TODA la cabeza blanca, será chistoso ir a las carreras con ropa deportiva, actitud positiva y por supuesto luciendo orgullosamente mi cabeza de abuela. 

cl.

jueves, 22 de mayo de 2014

El shampoo azul y otros productos.

Soy una persona totalmente obsesiva. Cuando me decido a hacer algo, me clavo a tal grado que como, respiro y duermo con esa obsesión hasta lograr mi objetivo. He gastado una fortuna en shampoos y acondicionadores para pelos grises, plateados y blancos como no se pueden imaginar.

El famoso “shampoo azul” [1] del que ni idea tenía de su existencia, por supuesto forma parte de mi nueva colección. Una gran cantidad de aceites a base de argán, ya que el pelo canoso tiende a ser más áspero que el de una mujer joven sin canas (creo que suena bastante lógico); aceites para hidratar el cuero cabelludo rojo por las inclemencias de los químicos utilizados por tantos años; mascarillas hidratantes que se deben dejar entre 5 y 10 minutos para que se restablezca el pelo (no es magia, por supuesto), y un sinnúmero de brillos y geles para antes y después del modelado.

A continuación les describo los que hasta ahorita me han dado resultados positivos.

Empecemos por el shampoo azul. (que más bien es morado)

Cuando los compré, no tenían del
mismo tamaño. Son shampoo y
acondicionador.
El primero que compré es de la marca Clairol. Se llama Shimmer Lights Shampoo.

A la hora de ponerlo en mi mano dije ¡QUE DIABLOS ES ESTO! Por supuesto tiene consistencia de shampoo, pero es de un tono morado/azul oscuro y pensé, ¿que estoy haciendo? Voy a parecer Pitufina. Pero no se alarmen, el pelo no queda azul. 

Aunque he de recalcar que NO SE DEBE USAR DIARIAMENTE. Yo lo uso cada tercer día, y por ahora me está funcionando.
Es en resumidas cuentas, un shampoo que va a eliminar los tonos amarillentos y cobrizos del pelo. Según dice en las reseñas de la marca “renueva y refresca los tonos apagados de los rayos y da brillantez al pelo cenizo; elimina el aburrido amarillo y da brillo al pelo plateado”.

En resumidas cuentas una MARAVILLA MILAGROSA. En estos momentos cualquier cosa que nos haga sentir bien y que nos de ánimos para llegar a nuestro objetivo es bienvenida.
Por supuesto el shampoo viene acompañado del ACONDICIONADOR (aunque se venden por separado). Es muy importante mantener nuestro pelo hidratado en el proceso, ya que de por sí las canas son más duras que el terso pelo de juventud, y pues el acondicionador azul MUY AZUL es apropiado. Se describe como: “una rica mezcla de emolientes, suavizantes e ingredientes hidratantes que da brillo, neutraliza el amarillo del pelo, lo acondiciona y le da una textura sedosa”. Prácticamente el producto IDEAL para no flaquear con esta decisión.

Shampoo clarificante

Mascarilla revitalizante a base de
aceite de argan.
Shampoo clarificante
Este tipo de shampoo, sirve para eliminar todo tipo de residuos usados en el pelo, y ayuda a restaurar su apariencia natural. Dicen que se debe utilizar antes de cualquier tinte, para eliminar lacas, sprays y acumulación de gel. La marca que yo compré es One ’n Only® Argan Oil Color Oasis Clarifying Shampoo.

Este shampoo sirve, como lo menciono antes, para quitar los residuos que dejan todos los productos que utilizamos en el modelado del pelo. Pero también ayuda a disminuir, aunque de manera muy paulatina y sutil, el colorante artificial que dejan los tintes. Es otro producto que no se debe utilizar a diario, porque puede resecar el cuero cabelludo. ¿¿¿MAAAS??? no gracias.

Aceite de argan de Marruecos

Aceite de argan de Marruecos
Los aceites especiales casi siempre son recomendables en cabellos teñidos, maltratados por el sol, la playa y el cloro de las albercas. Cuando llevas años pintando tu pelo (aunque no nades ni vayas a una playa desde hace años) el pelo se va a ver como zacate, duro, sin cuerpo y con textura de alambre de púas. Tal vez exagero un poco, pero por lo menos así lo he llegado a sentir.

¿Qué es el aceite de argán?

Conocido por los expertos como “oro líquido” para la piel y el cabello, se obtiene de los frutos del árbol de argan, una especie endémica de Marruecos. Es rico en ingredientes naturales que desempeñan un papel importante en la renovación y regeneración celular.
Por su escasez en el resto del mundo y los grandes beneficios que se le atribuyen para la piel y el cabello, este exótico aceite botánico es muy valorado y, aunque no resulta precisamente económico, hoy es posible encontrar productos enriquecidos con el mismo, a un precio más accesible.

Árbol de argan, crece hasta más de 10 metros
y se da en Argelia y Marruecos.
Sus beneficios son innumerables, pero básicamente el mayor de estos está en su composición. Es rico en vitamina E, carotenos y ácidos grasos Omega 3 y 6, es un poderoso antioxidante, humectante y restaurador natural. Por si fuera poco, es sumamente ligero y compatible con el cabello y cuero cabelludo, por lo que penetra fácilmente sin dejar una sensación grasosa u obstruir lo poros.
Es de lo más humectante, controla el frizz y da brillo.

Para adquirir una botellita de aceite, no tienes que ir a una tienda especializada en productos de belleza; lo puedes conseguir casi en cualquier supermercado y hay de varias marcas. El chiste es que sea de Marruecos porque creo que es el único país en donde se cultivan estos árboles y se usan para su consumo, tanto alimenticio como cosmético.

En fin, queridas lectoras, seguimos aprendiendo a lo largo del camino, todo lo que conlleva un cambio drástico en nuestra forma de vida, para nuestro propio beneficio. 

Estoy atenta a sus comentarios, y seguimos en esto.

cl.











[1] En ningún momento pretendo comercializar con las marcas mencionadas. Son los productos que yo he comprado para mi uso personal, y que he visto en las tiendas especializadas.